Qatar 2019: Desde el corazón del paddock, por Samuel Brito

Para quienes no le conozcan, Samuel Brito es un joven ingeniero palmero que lleva trabajando un par de temporadas en el paddock de Mundial de MotoGP y que esta temporada tiene bajo su responsabilidad la telemetría de las KTM de Andrea Migno y Jaume Masía, los jóvenes pilotos del equipo Bester Capital Dubai de Moto3.

Carrera tras carrera, el simpático ingeniero de La Palma, se ha ofrecido a contarnos sus vivencias desde el mismo corazón del paddock; no sólo en el aspecto deportivo, del que también tendremos información, si no que nos relatará detalles desconocidos para los que sólo podemos ver las carreras del Continental Circus desde el otro lado de la pantalla.

La primera parada del Mundial de MotoGP es en Qatar, pero los equipos de Moto3 tuvimos el último test de pretemporada justo el fin de semana anterior, por lo que decidimos quedarnos en el país asiático situado en la península arábiga y bañado por las aguas del golfo pérsico. Lo habitual es llegar al circuito del Gran Premio el miércoles y marcharnos los domingos por la tarde noche, pero esta vez estuvimos 10 días que aprovechamos para familiarizarnos e integrarnos todos los miembros del equipo Bester Capital Dubai, además de hacer un par de días de turismo por la zona.

A los test previos al primer Gran Premio acudimos sólo con un piloto; con Andrea Migno ya que Jaume Masía aún no estaba recuperado de la fractura en el pié que se produjo en el anterior test de Jerez. Unos entrenamientos en los que nos costó dar con la tecla adecuada para obtener un buen ritmo. Tuvimos que trabajar una barbaridad sobre la moto para que Andrea se encontrase cómodo rodando. El último día hicimos unos cambios que se mostraron acertados ya que, en tan solo 5 vueltas, Migno encontró el ritmo y podía empujar con confianza. En definitiva, unos test agridulces que terminaron con la incertidumbre de saber si estábamos en el camino correcto de cara a la carrera del siguiente fin de semana… Pronto lo sabríamos.

El miércoles previo a la carrera comenzaba de nuevo el trabajo, con la comprobación de todo el material y la llegada de todo el equipo, incluidos los dos pilotos, ya que Jaume llegaba con el alta médica para carrera, aunque bastante dolorido de su pié, con muletas y con una bota especial de Alpinestars para poder subirse en la moto (los pilotos son de otra pasta). Todos esperábamos que el paso adelante dado en el último momento en los test previos se confirmara como apropiado de cara a la carrera, y si sería suficiente para luchar por los primeros puestos o para estar en el Top15.

Lo primero que hacernos al llegar al box que nos asigna el organizador es montar toda nuestra estructura; desde los paneles, los sistemas eléctricos, de aireación, antenas de televisión y todo lo demás. Los mecánicos se encargan de desmontar las motos, por completo o casi, y verificar que todo está correcto. Moto3 es una categoría tan igualada que la diferencia la marcan los pequeños detalles. Mientras los mecánicos trabajan, los ingenieros nos sentamos con los pilotos y nos ponemos en “modo carrera” analizando y planteando los objetivos de carrera y cómo afrontarlos. También solemos dar alguna vuelta a pié por el circuito con los pilotos, analizando los puntos clave para sacar los tiempos y para compartir momentos de complicidad con los pilotos que nos ayuden a fomentar ese sentimiento de equipo tan necesario en un deporte sumamente exigente, con las cámaras siempre encima de nosotros, pendientes hasta del último detalle.

Los jueves se terminan de montar las motos y los ingenieros vemos con los pilotos las mejores estrategias y puesta a punto para afrontar las jornadas venideras. Analizamos todos los detalles en los ordenadores. Una vez consensuada la estrategia, enviamos a los mecánicos el setting inicial más adecuado para que las motos puedan rendir al máximo, mientras ellos se encargan de configurarlas con esos parámetros. El viernes se comienza a rodar en pista y comienzan a llegar los datos relevantes de cada piloto. En cada sesión de entrenos, analizamos los datos de la telemetría y buscamos dónde robar décimas al cronómetro, haciéndoles ver a los pilotos dónde y cómo pueden mejorar. 

Es fundamental la complicidad y sobre todo, la motivación psicológica para que ellos puedan rodar al límite buscando el mejor tiempo posible. Si el piloto no se encuentra confiado no va a empujar hasta el límite y las sensaciones no van a ser las correctas. Es increíble, pero son capaces de detectar detalles mínimos como una diferencia de un milímetro en la altura del amortiguador trasero, por ejemplo. Cuando terminan los entrenamientos, el sábado por la tarde, nos sentamos a hablar con los pilotos de cara a carrera y evaluamos los datos recogidos para ofrecerles la mejor puesta a punto posible de cara a la carrera del domingo.

Los entrenamientos demostraron que “lo que encontramos” el último día de los test previos no había sido un espejismo. Andrea Migno comenzó muy bien y pudimos dar un gran paso adelante. En la tercera vuelta ya había mejorado los tiempos de pretemporada, lo que presagiaba un buen fin de semana. En el último segundo de la lucha por la pole, Migno se puso cuarto, pero le quitaron la vuelta al pisar con las dos ruedas fuera del trazado permitido, al tener que levantar la moto para no dar con otro piloto más lento. La reclamación no sirvió para nada y salimos a carrera desde la 17ª posición. Jaume Masía sufrió más en los entrenos. El pié no le dejaba quitar cambios con la debida soltura para aprovechar el freno motor. El objetivo era rascar algún punto en carrera, aunque sabíamos que iba a ser una dura tarea.

El domingo, antes de la carrera, en el warm-up, Masía hizo un gran tiempo que nos dio ilusiones a pesar del hándicap que suponía salir desde el puesto 27. Pero la suerte no estaba con Jaume, y en carrera, cuando ya había recuperado unas cuantas posiciones, un piloto entró colado y se lo llevó por delante. Una pena tras tanto esfuerzo y sacrificio, pero ahora sólo queda que se recupere del pié de cara a Argentina. Por su parte, Andrea Migno, salía a cerrera muy ilusionado y con buen ritmo para estar en el grupo de cabeza. De hecho, en la primera vuelta ya estaba entre los 10 primeros, tuvo un toque con otro piloto que le relegó a la última posición de cabeza y, lo peor, le dejó sin rebufos con los que poder recuperar tiempo en la recta de meta, con el viento en contra. Aún así pudo ir remontando y terminó el 14, con dos puntitos bajo el brazo, conquistados a fuerza de voluntad en la zona más revirada del circuito, vuelta tras vuelta. Un magnífico trabajo que nos da fuerzas de cara a la siguiente carrera en Termas de Rio Hondo, en Argentina.

La estructura del equipo

El Bester Capital Dubai de Andrea Migno y Jaume Masía cuenta con una plantilla al uso en cualquier equipo de la categoría. Dos mecánicos por moto se ocupan de los cuidados de la delicada mecánica de la KTM 250cc. Al frente de cada moto hay un ingeniero jefe que es el responsable de todas las decisiones sobre cada moto y que cuentan con el apoyo del ingeniero electrónico o telemétrico, que en este caso es nuestro paisano Samuel Brito, responsable de este apartado en ambas motos. Además, los cuatro mecánicos cuentan con la ayuda de un quinto que es el encargado de los neumáticos (Dunlop) y de la gasolina para cada una de las motos. También contamos con el apoyo de un técnico de KTM (motor) y otro de WP (suspensiones) que nos ayudan durante las carreras, como asistencia de fábrica.

Los viajes del equipo

Cada equipo cuenta con una agencia o departamento propio que les organiza los viajes y el alojamiento. Desde billetes de avión hasta alojamiento cerca del circuito y los vehículos de alquiler para los desplazamientos. Tras terminar el GP de Qatar, las motos y la estructura se dejó embalada en cajas para que el organizador del campeonato, Dorna, lo enviara por avión hasta Argentina. Cuando lleguen el próximo miércoles al circuito, lo tendrán en su box. Aparte del periplo asiático de final de temporada, el desplazamiento a Argentina es el más largo del año; de hecho se marchan el lunes para llegar con tiempo. En los Grandes Premios de Europa las motos y la infraestructura viaja en camión, lo que permite ser más flexibles.

Entre carrera y carrera

No es que tengamos tareas encomendadas específicamente hablando, pero este es un trabajo pasional y ya estés en el gimnasio o en el supermercado, siempre estás pensando cómo mejorar algún detalle para robarle una décima al crono. No es un trabajo normal, en el que fichas a la entrada y, a la salida, te olvidas de todo. Aquí la pasión te hace darle vueltas a los problemas en busca de soluciones. La responsabilidad es la responsabilidad, y eso no es delegable. Hay muchos momentos en los que me ocurre algo y tengo que dejar lo que estoy haciendo para apuntarlo en el móvil. Detalles insignificantes a veces, pero que otras veces pueden suponer un pequeño paso adelante en una categoría en la que las diferencias son mínimas.

De cara a Argentina 2019…

Está claro que vamos a Argentina con la motivación por todo lo alto y con ganas de demostrar el potencial que sabemos que tenemos para estar delante y que en Qatar no se vio reflejado en el resultado final. Vamos allí con la intención de estar lo más arriba posible y seguro que podremos luchar por el pódium. Migno está con muchas ganas de traer un buen resultado después de la mala suerte de Qatar y Masía, a pesar de no tener el pie al 100%, me dice que no será un hándicap e irá a por todas…

¡Suerte al Bester Capital Dubai, el equipo de Moto3 con acento canario!