¡Prueba superada! Las Zero Mortorcycles completaron el Desafío Verde

Dos unidades de Zero Motorcycles atravesaron Canarias, de punta a punta, con una sola recarga de baterías

Que las motos eléctricas han venido para quedarse es algo que todos damos por supuesto. Y no sólo como vehículo de transporte; también en la faceta de ocio que toda moto debe ofrecer. Aunque no hay muchos modelos en el mercado que ofrezcan esa deseada combinación de practicidad y diversión, las protagonistas de nuestro reto; las Zero SR/F y SR/S distribuidas por Femotor – Fedeauto, han demostrado hacerlo francamente bien.

27 de junio de 2021, Frontera (El Hierro). El “Desafío Verde” de Zero Motorcycles Canarias ha cumplido con los objetivos marcados. Desde Órzola (Lanzarote) hasta Orchilla (El Hierro), las Zero SR/F y SR/S han atravesado 5 islas del Archipiélago Canario, con una sola recarga de las baterías ZF14.4 de iones de litio que han garantizado suficiente autonomía. Además, las prestaciones del compacto motor ZF75-10, que ofrece una potencia de 110 CV y una cifra de par de 190 Nm, capaz de alcanzar los 200 km/h, ha permitido a los pilotos gozar de sensaciones similares a las de una “mil” de combustión, sin perturbar el silencio y sin emitir gases nocivos para el medioambiente de Canarias.

El “Desafío Verde” partió el pasado jueves, tras la Noche de San Juan, desde el lanzaroteño Muelle de Órzola y terminó en el Faro de Orchilla, en la Isla del Meridiano, tras atravesar Lanzarote y Fuerteventura, hacer escala en Gran Canaria, cruzar Tenerife y concluir en El Hierro. En total han sido 395 kilómetros por carretera y 4 enlaces que suman otras 191 millas náuticas con las Zero amarradas en las entrañas de los modernos ferris y catamaranes que hacen de Canarias un corredor de alta velocidad.

El objetivo era demostrar la viabilidad de las motos eléctricas, también como vehículo de ocio, y de paso aclarar dudas.

Con las primeras luces del amanecer del Día 1 del “Desafío Verde” dejábamos atrás el Muelle de Órzola, con la despedida del famoso cangrejo de los Jameos del Agua, y poníamos rumbo a la Cámara de Comercio de Lanzarote, que dispone de la primera “electrolinera” de Canarias. El Monumento al Campesino de César Manrique y los abnegados viñedos de La Geria contemplaron el silencioso rodar de las Zero Motorcycles. Desde Playa Blanca cruzamos a la vecina Fuerteventura que recibía a las motos de Femotor – Fedeauto con la colorida panoplia que forman el verde esmeralda del mar y el inacabable amarillo de las Dunas de Corralejo. Los “guanches” y las curvas de Betancuria ponían el picante a una ruta tranquila basada en la estrategia para llegar con carga a Morro Jable, donde llegamos con un 10% de carga que nos permitió, además, hacer un pequeño reportaje por los alrededores de Las Palmas de Gran Canaria, único punto de recarga de las motos durante el reto.

Con las baterías a tope de carga, el Día 2 embarcamos con rumbo a Santa Cruz de Tenerife, y tras nuestra breve visita a Femotor, sede de la marca de Santa Cruz (California) en la provincia, reemprendimos la marcha con el ascenso por la dorsal de la isla a la cumbre para gozar de la experiencia única de rodar en silencio por el paisaje lunar de las Cañadas del Teide. El vertiginoso descenso y las curvas de Vilaflor permitieron disfrutar a nuestra pareja de pilotos de mapas de potencia menos conservadores y aprovechar la regeneración de las baterías, que tocaron el Muelle de Los Cristianos, con el 45% de energía, suficiente si fuera necesario, para regresar por autovía a la capital tinerfeña. Tras el amarre en La Estaca, el puerto de carga de El Hierro, aún nos quedaba llegar a Frontera, y al siguiente día, alcanzar junto al antiguo Meridiano 0, el Faro de Orchilla, meta del Desafío Verde Zero Canarias, con el 27% de batería.

Elegir la Isla de El Hierro como final del Desafío Verde no ha sido casualidad.

La Isla del Meridiano es capaz de autoabastecerse de energía renovable, gracias a instalaciones como la Central Hidroeólica de Gorona del Viento, una genialidad de la ingeniería civil que no solo da servicio a los habitantes de El Hierro sino que también es capaz de alimentar las desaladoras de la isla para obtener agua potable cerrando el círculo de la autosuficiencia. Además, la apuesta del Cabildo de El Hierro también contempla un plan de movilidad sostenible para que todos los vehículos de la isla, tanto particulares como de alquiler, sean eléctricos.

Un desafío real que ha servido para demostrar que, con un poco de organización y sabiendo sacar partido a los modos de conducción, la faceta de ocio de las motos eléctricas Zero en un territorio limitado como Canarias, es posible. El escepticismo y las críticas recibidas por los que consideran ridículo “electrizar” la moto, contrasta con la satisfacción que quienes han demostrado que la autonomía de las motos no es un problema y la diversión se intensifica al disfrutar de los sonidos del paisaje.

Femotor y Fedeauto, distribuidores autorizados de Zero Motorcycles en Canarias, se han marcado el objetivo de darle un empujón a la movilidad limpia apostando por los “Tesla” de las dos ruedas y potenciar, todavía más si cabe, el mensaje de que la movilidad eléctrica, sostenible y de ocio, es posible.