Prueba Peugeot Django, deja tu coche y pasea por la ciudad con estilo

Peugeot no es un fabricante advenedizo en el mundo de las motos. Desde 1898 llevan produciendo motocicletas; incluso en 1955 lanzaron al mercado su primera scooter, la S55. Desde entonces mucho ha llovido y muchos son los fabricantes que apuestan por el scooter en general, aunque bastantes menos los que lo hacen en el segmento de los modelos neo-retro, vintage o “chic”, y muchos menos aún los que consiguen triunfar en el mismo.

Si algo no se le puede negar a la apuesta de Peugeot Scooter es su originalidad. El Django es un scooter fresco, totalmente desenfadado y que emana calidad en unos acabados impecables y vistosos. Un modelo en el que se ha buscado sobre todo, facilidad de conducción, economía de consumo y mantenimiento, suavidad y ese toque diferenciador que le hace destacar sobre el resto de la oferta del mercado.

Aunque su look retro nos pudiera llevar a engaño, su atractiva silueta inspirada a los años 50 y 60 esconde detalles tecnológicos actuales como las luces LED, delante y detrás, toma de corriente USB es su pequeña guantera tras el escudo, o el cuadro de instrumentos digital. A cambio nos regala detalles que visualmente nos transportan a otra época como los clásicos cerquillos cromados del faro, las ruedas con banda blanca o las pinturas bitono.

Como decimos, su diseño no se queda sólo en un acertado ejercicio estético, es una moto tremendamente funcional y con un tamaño que se queda a medio camino entre los Scooters más pequeños del mercado y los Scooters GT125. Y si a su acertada estética le sumamos la inacabable capacidad de personalización, con más de 100.000 combinaciones disponibles gracias a la versión ID, configurable a la medida de cada uno a través de la web de la marca, tendremos la moto ideal para los que gustan diferenciarse del resto. Hasta 22 colores de carrocería, 7 asientos diferentes, tres tipos de retrovisores o pequeños detalles de la carrocería se podrán combinar a gusto del cliente.

De sus voluptuosas líneas, destaca el abombado frontal, con faro en el manillar, como manda la moda más retro, el asiento de dos piezas y las llantas de aluminio. El suelo en la zona de los pies es plano y amplio. Incluso cuenta con un gancho para transportar algún bolso. La scooter de Peugeot tiene un tamaño considerable, aunque sin llegar a ser desproporcionado. Para aligerar la zona intermedia, la Django dispone de unas tomas de aire laterales, y su zaga, uno de las partes más conseguidas de la moto, dibuja una línea continua que desciende hasta el ápice trasero. Un diseño que hará las delicias de los amantes de lo retro y que se ve muy bien conjuntado con la profusión de pequeños elementos decorativos que emulan  cromados o aluminios pulidos.

Allure, Sport, Evasion y Heritage, son los cuatro acabados disponibles y que engloban diferentes configuraciones tanto estéticas como funcionales. Desde lo más sencillos detalles pasando por los más deportivos e incluso algunos con claro enfoque turístico. La gama empieza por el Heritage, que incorpora retrovisores cromados de forma redonda, llantas de color blanco, asiento de dos piezas y está disponible en cuatro colores básicos: blanco, negro, azul y verde. El escalón siguiente lo conforman el Evasion y Sport. Ambos añaden respecto al Heritage el logo iluminado del frontal y la frenada combinada (SBC) y comparten entre ellos los retrovisores ovalados en gris mate. Respeto al Evasion destaca por un doble asiento con detalles en blanco, llantas y flancos de los neumáticos en blanco, parabrisas corto y portaequipaje delantero cromado. Esta versión está disponible en cuatro colores bitono: pistacho, rojo, naranja y azul.

Y si nos centramos en los elementos que facilitan la vida al usuario, encontraremos un hueco bajo el asiento que permite albergar un casco semijet, una guantera con toma de corriente tras es escudo frontal, otra tapa para el llenado del depósito de gasolina, el citado gancho para transporte de bolsas y unos reposapiés escamoteables para el pasajero, que se encastran en la carenado. El cuadro de instrumentos posee una retro iluminación azul e información del nivel combustible, kilómetros totales, parciales, temperatura exterior, hora, carga de la batería, indicador de hielo y aviso de mantenimiento.

Nuestra unidad de pruebas, cedida por Pole Positon, el nuevo concesionario oficial Peugeot Scooters en Las Palmas, contaba con el acabado “Sport” y la motorización de 125cc, también se comercializa con motor de 50cc. Se trata de una mecánica de SYM, de carburación y refrigerada por aire que entrega algo más de 10CV con excelente suavidad. Es la misma motorización que emplean otros modelos de la marca como la Citystar de carburación o la Speedfight 3 de 125 cc. Un motor que destaca por su suave entrega de potencia y un contenido consumo que no llega a los 3l/100km, y que gracias a su depósito de 8,5 litros promete una buena autonomía.

Nada más subirnos al Django agradecemos el acogedor mullido de su asiento, símbolo de la confortabilidad que nos va a regalar. Hay mucho espacio para las piernas y los mandos están en buena posición, con el manillar, al viejo estilo, algo más bajo de lo que hoy en día es habitual. La altura del asiento, 770mm, permite llegar cómodamente con los pies, y el suelo plano facilita la maniobra. El radio de giro es sorprendentemente amplio y puedes aparcarla sobre el caballete central o la pata lateral. También dispones de pedal de arranque, que nunca está de más. Los primeros pasos después de que el suave monocilíndrico cobre vida suavemente, son clarificadores de la facilidad de manejo de este scooter de aire clásico.

El motor de origen SYM destaca por su pronta entrega de potencia, sale muy bien de los semáforos, aunque luego su potencia no permite excentricidades que, a buen seguro, no serán del agrado de quien se decante por el modelo de Peugeot Scooters. Gracias a su contenido peso, 129 kilos, los 10,2 CV declarados dan suficiente para circular con mucha soltura por ciudad. La suavidad mecánica es exquisita y en general es un scooter muy agradable de conducir. Lo más destacable es el buen tacto del gas y la suavidad general a cualquier régimen, que te invitarán a “aparcar el coche” y moverte con soltura y estilo entre el tráfico diario.

El chasis ofrece un comportamiento noble y firme, sin flexiones en la pipa de dirección, algo habitual en determinados scooter de suelo plano. Los frenos de nuestra unidad de prueba contaban con el sistema Synchro Braking Concept -SBC-, que amplía el nivel de seguridad, sobre todo para los que llegan del mundo del coche con su carnet B+3. Básicamente se trata de un sistema integral que acciona tanto la pinza trasera como la delantera cuando presionamos la maneta izquierda, mientras que aplicando fuerza sobre la derecha se incide más en el tren delantero.

Las suspensiones son bastante cómodas gracias al buen equilibrio entre ambas. Incluso cuando vas tumbado en las rotondas, hasta que el caballete avisa del límite, proporcionan una consistencia que se transforma en seguridad. Sorprende el acertado resultado dinámico de un scooter que, a priori, ha centrado su objetivo en el diseño. Y todo ello con un consumo muy ajustado. Estirando al máximo el depósito le hicimos un total de 274 kilómetros, sin cortarnos mucho con el gas.

En definitiva, que si estás buscando un scooter con encanto y que destaque por los buenos acabados en todos los detalles y un manejo súper fácil, el Django debe estar entre tus opciones. Un scooter que no se queda en lo superficial y que garantiza unas cualidades dinámicas excelentes para moverte con estilo por la ciudad. No encontrarás en el mercado ninguno con tantas opciones de personalización, y su precio es bastante ajustado, para la calidad que ofrece.

Puedes solicitar una prueba en Pole Position, concesionario oficial Peugeot Scooter

Precio Django 125 Sport.- 2.835 € (No incluye los 165 € de gastos de matriculación)

Prueba realizada por el equipo de Canariasenmoto.com