Prueba Ducati Scrambler Full Throttle 2019, Happy Eternal Spring

La familia “Scrambler by Ducati” llegó a la firma de Bolonia con cierta timidez, pero apenas cuatro años después de su lanzamiento, se han vendido más de 55.000 Ducati Scramblers en todo el mundo -más de 100 en Canarias-, lo que dice mucho de un modelo que ha sabido conectar con un tipo de cliente dinámico, fresco y con las ideas muy claras del uso y lo que realmente necesita en su moto.

En 2019 la nueva familia Ducati Scrambler puede presumir de una línea más moderna que combina con una mayor comodidad y unas asistencias a la conducción que la convierten en un modelo más seguro para que tú te centres en disfrutar de la “Land of Joy” y de la “Happy Eternal Spring” de Canarias, donde las Scrambler encajan como anillo al dedo. Un clima envidiable durante todo el año y unas carreteras de curvas, jalonadas por espectaculares paisajes, de las que disfrutar sobre dos ruedas, tras un ancho manillar y empujados por un motor tan potente como sencillo… Eso se llama diversión sin fin.

Precio Ducati Scrambler Full Throttle 2019.- 10.490 euros (Hay una Scrambler Icon Yellow desde 8.890 euros)

Esta primera remodelación de la familia Scrambler supone una claro síntoma de que la fábrica de Bolonia va a seguir apostando por un concepto de moto con marcada personalidad vintage. Las novedades que incorpora la versión 2019 son tan sutiles que si no te fijas bien, pueden pasar desapercibidas. Mejoras ergonómicas y cambios estéticos que no desentonan con el original atractivo del modelo más desenfadado e irreverente del actual catálogo de Ducati Canarias.

El cambio más evidente es el del faro delantero, una nueva óptica LED DRL (Daytime Running Light) que aumenta la visibilidad de la moto en el tráfico, incluso con luz de día. La estructura interior en forma de X, es un claro guiño a la cinta adhesiva cruzada que se le colocaba en aquellos primeros modelos scrambler para evitar que saltasen los trozos de cristal del faro en caso de impacto. Los intermitentes, también con tecnología led, incorporan la práctica función de apagado automático.

Nuestra protagonista, la Full Throttle, sigue la estela de la Scrambler de flat track conducida por el piloto californiano Frankie Garcia durante el Campeonato American Super Hooligan de 2018. Con su depósito de doble tonalidad negro-amarillo y franja blanca, parte posterior completamente nueva con un asiento exclusivo -comodísimo, por cierto- y placas porta dorsales en amarillo con borde blanco. Una moto con verdadera alma de competición “dirt track”. Un manillar de conicidad variable de baja altura -ligero y ergonómico-, grueso guardabarros delantero y escape de doble silenciador se suman a la singularidad de la Scrambler Full Throttle. Las aletas de la culata pulidas y las llantas (18” delante y 17” detrás) con acabado mecanizado contrastan con el “black” genérico de la moto y refuerzan un estilo muy atractivo.

La seguridad se maximiza con la instalación del nuevo Bosch Cornering ABS que aumenta la seguridad activa durante el frenado, un aditamento incluido por primera vez en esta categoría de motos y que permite una conducción más relajada. Otra forma de hacer más confortable la vida a bordo de la nueva Scrambler es la implantación de un embrague hidráulico de tacto más suave, mientras que la maneta ajustable – como la del freno delantero – asegura que la separación entre maneta y manillar se pueda adaptar a las necesidades individuales, pensando en los y las que tenemos las manos pequeñas.

Para rematar el repaso a las novedades, nos fijamos en las piñas de los mandos, más ergonómicas para facilitar al usuario una navegación más intuitiva por el menú del cuadro de instrumentos LCD, que ahora incluye información sobre el nivel de combustible y marcha engranada. Desde las piñas además se puede  controlar el funcionamiento sencillo del Ducati Multimedia System, que permite al piloto escuchar sus listas de reproducción, contestar llamadas entrantes o conversar con el pasajero a través del intercomunicador.

A sus mandos, con el manillar ancho y alto, la posición de conducción invita a ponerte en marcha y marcarte un rumbo hacia lo desconocido. Otra novedad estética de la nueva Scrambler es que el cable de acelerador ya no va por encima, sino por debajo del puño. El asiento, también nuevo, al igual que la suspensión trasera ajustable, está a la altura ideal para que cualquiera se sienta seguro sobre la Scrambler, ayudado además por el  reducido peso, su bajo centro de gravedad y las anchas huellas de sus neumáticos de remarcado dibujo mixto.

Cuatro años después, ha llegado una segunda generación de Scrambler, con muchos pequeños cambios que la convierten en un modelo más fácil, seguro, cómodo y práctico de conducir. Respecto a su motor, sigue siendo el mismo, un bicilíndrico refrigerado por aire y 2 válvulas de 803 cc, 73 CV y embrague anti-rebote, sustentado por un chasis multitubular de acero, basculante de aluminio fundido, suspensiones Kayaba, neumáticos mixtos con dibujo remarcado y firmados por Pirelli (MT60 RS) y una práctica toma de corriente USB bajo el asiento.

Desde los primeros metros encima de ella,  la Full Throttle 2019 se siente igual de agradable que siempre; eso sí, más fina en todos los sentidos, desde el accionamiento de los mandos (sobre todo el embrague, una auténtica delicia) a la entrega del motor. Los acabados también son mejores, corrigiendo con acierto, los detalles más criticados por los usuarios. 

Es bajita pero no necesitas ser un contorsionista para manejarte bien, a baja velocidad en ciudad, o a ritmo alegre en las zonas de curvas. El ancho manillar de sección cónica permite un “control total” del tren delantero, que por cierto, se nota algo más firme, aunque sin perder su tarado confortable. El motor es más suave, sobre todo en la zona baja, aunque sin perder su carácter, y es suficiente para disfrutar de una conducción alegre, a cualquier ritmo y sobre todo tipo de carretera.

La nueva Scrambler te permite disfrutar de cualquier tipo de asfalto, y del día a día en ciudad, sin despeinarse. Es una moto que huye de los radicalismo para hacerlo todo “Happy” y fácil. El bajo centro de gravedad y un chasis rígido que puede con todo, permiten una conducción intuitiva en la que los cambios de decisión, ya sea trazada, frenado o aceleración, se producen de forma casi automática. Es una moto que pesa menos de 190 kilos y se puede manejar con agilidad y precisión, sin necesidad de ser un adalid de la conducción. La potencia llega ahora más filtrada en el primer tercio del recorrido del acelerador aunque recupera todo su carácter en cuanto retuerces el puño con decisión.

Polivalente como la que más y con un aire muy personal -y apto para todo tipo de personalizaciones, que también es importante-, aunque el aspecto básico de toda scrambler que se precie es la sencillez, nada de elementos superfluos que no tengan ninguna utilidad real. Una moto para la vida real que te permite, desde ir a comprar el pan, hasta meterte por una playa de arena, aprovechando sus neumáticos de tacos de serie, e incluso pudiendo ponerte de pie en algunas zonas, para sacar a relucir tu lado más salvaje.

De las novedades que incorpora, lo más destacable es su embrague de fácil accionamiento, y regulable para todo tipo de manos, y el nuevo sistema ABS BOSCH con sensor de inclinación y que te permite apurar la frenada incluso cuando ya estás trazando en plena curva sin que por ello estés condenado a perder el control sobre la rueda delantera. Un verdadero avance que viene heredado de sus hermanas mayores y que dice mucho de la seriedad que Ducati quiere darle a un modelo que es embajador de la marca en los rincones más desperdigados del mundo.

Además de esta Full Throttle, la familia Scrambler 2019 (con el motor de 803cc) está compuesta por otros modelos como la Icon, disponible en naranja Atomic Tangerine con bastidor negro y asiento negro con laterales grises o en el clásico amarillo ’62 Yellow Tangerine con bastidor negro y asiento negro con laterales grises. La “Café Racer” también se renueva, inspirada -sobre todo por los gráficos Silver Ice Matt con bastidor azul- en la legendaria Ducati 125 GP Desmo, mientras que la más campera de la familia, la Desert Sled, resucita el espíritu de las motos off-road clásicas americanas sin comprometer los valores de estilo de vida Ducati Scrambler. Con su bastidor rojo, nuevo asiento con cosido a juego y llantas de radios con los cerquillos en negro, esta moto está más actualizada que nunca.

Desenfadada, irreverente, atrevida y alegre como la Happy Eternal Spring de Canarias

La Full Throttle hace honor a su nombre de “Scrambler” presumiendo de un motor, chasis y escapes, desnudos, sin carenados, que son los auténticos protagonistas de una moto realmente bonita con, aparentemente sólo lo básico, pero sin descuidar los componentes de máxima calidad. Su legendario motor en “L” sigue proporcionado muchas alegrías a una moto realmente divertida que te ofrece todo lo que necesitas para poder pasarlo en grande, ya sea entre el tráfico de tu ciudad como en las carreteras reviradas. Lista para ser conducida para los usuarios del carnet A2 y con una carga tecnológica nunca vista en una moto de esta categoría; así es la nueva Full Thottle que te ofrece Ducati Canarias.

Equipamiento del piloto: Casco Shark Spartan Apics, Chaqueta Dainese Assen, Pantalones Alpinestars Denim Rogue y Botas Alpinestars SP-1 V2

Prueba realizada por el equipo de Canariasenmoto