Nace Aspar Air, el chaleco de moto con airbag “made in spain”

JORGE MARTÍNEZ ASPAR ‘APADRINA’ UN NUEVO PROYECTO SOBRE SEGURIDAD VIAL

El aire es vida, ya sea el que rellena los pulmones para respirar como el que hincha en cuestión de milisegundos el airbag de un chaleco para salvaguardar la integridad de los motociclistas y evitar lesiones de mayor envergadura. Y como la seguridad no es una opción, hace algunos años las instituciones encargadas de velar por la seguridad vial empezaron a remover conciencias y reglamentos para impulsar un mayor uso de protecciones ante el creciente número de accidentes en carretera. En medio de aquel escenario en ebullición por la seguridad, una empresa valenciana, originaria de Bétera, se conjuró para diseñar y fabricar su propio chaleco con airbag: el ASPAR Air. Una visita a EICMA, el famoso salón de la moto de Milán, hizo saltar la chispa.

• El chaleco, diseñado y manufacturado en España, ya se puede reservar en las tiendas autorizadas.
• Disponible en dos acabados (versiones 0.5 y 1.0) con un precio base de 197,52 euros más IVA.

De aquella chispa se encendió un proyecto que desarrolló un chaleco con airbag exclusivo que hoy ve la luz de forma oficial con dos particularidades excepcionales. Una, que se trata de un chaleco 100% denominación de origen española con diseño, manufactura y ensamblaje íntegramente nacional. La segunda, que del proyecto participa el tetracampeón del mundo y CEO del Aspar Team Jorge Martínez Aspar, que da nombre al chaleco con el que se exhibirá en los escaparates de los puntos de venta, junto a otros socios como Ricardo Ramilo, CEO del Grupo Rodamoto.

El chaleco ASPAR Air, certificado en las instalaciones del CRITT Sport Loisirs (Regional Centre for Innovation and Technology Transfer) de Châtellerault (Francia), ha sido homologado conforme a la norma Norma Europea 1621-4 sobre protecciones inflables para motociclistas y ha superado todos los test requeridos, consiguiendo una velocidad de activación e hinchado completo de 200 milisegundos y superando las pruebas de impacto, tallaje (100% protección torácica y 120% protección de espalda) y resistencia de la cinta a la rotura.

Su sistema de inflado es sencillo y de origen mecánico. El airbag se activa por un sistema de compensación de masas. En el momento en el que la moto cae, la cinta que une la misma con el chaleco del motociclista se tensa y tira del resorte que, a su vez, suelta la aguja percutora y pincha el cartucho de gas, llenando súbitamente la bolsa del airbag. Los cartuchos de gas, también propiedad de la marca cartuchosC02 y manufactura propia, se comercializarán a través del mismo circuito comercial.

Ya la venta en los distribuidores autorizados, el ASPAR Air se comercializa en dos versiones (denominadas 0.5 y 1.0) en función del tamaño y la cantidad de tejido que lo recubra. Y tiene un precio de partida de 197,52 euros (más IVA), lo que le convierte en uno de los más competitivos del mercado actual entre los chalecos certificados con sistema de inflado mecánico. Este detalle es crucial en un escenario en el que, aunque de momento no es obligatorio el uso de estas protecciones hinchables, empiezan a proliferar estos dispositivos por su importancia en la protección de la espalda, cuello, estructuras medulares y otros órganos vitales, en grave riesgo durante un accidente.

Curiosamente, la implantación del chaleco ASPAR Air, coincide con los 15 años de la aparición del primer experimento piloto de airbag con motivo del Gran Premio de la Comunidad Valenciana de 2007, cuando debutó el primer airbag en competición en el Circuito Ricardo Tormo. Posteriormente, en 2018, acabó siendo obligatorio en todas las categorías del Campeonato del Mundo.

Además, el ASPAR Air sale a la venta dos años después de que Anesdor, y el RACE, auspiciados por la DGT, promoviese la campaña #ponteunairbag de la que precisamente fue embajador Jorge Martínez Aspar. “El airbag va a suponer un antes y un después en la accidentalidad de los motoristas", subrayó entonces el director General de la DGT, Pere Navarro. Hoy, el chaleco ASPAR Air, llega a un mercado que, en breve, verá de forma natural su utilización (como la de los cascos hace varias décadas) y que está ayudando ya a paliar las terribles consecuencias de la siniestralidad.

JORGE MARTÍNEZ ASPAR, CEO Aspar Team: “Para mí es un orgullo formar parte de un proyecto como el de Aspar Air. Es un chaleco con airbag de diseño español que aporta su granito de arena en un mercado cada vez más concienciado de que hay que invertir en el sector de la seguridad. Aparte de materiales de protección como el casco, los monos, guantes o botas, el uso del airbag se ha ido extendiendo y se ha convertido en un producto crucial para salvaguardar la vida de los moteros. Para mí supone una gran satisfacción colaborar en este proyecto que, al margen de una motivación empresarial, tiene un contenido social muy importante. Desde que comencé a correr en moto, la evolución de la seguridad ha sido fulgurante y, lo más importante, es que todo aquello desarrollado dentro de la competición tenga ahora un reflejo en el equipamiento de los usuarios. Ir en moto es muy bonito, pero lo es incluso más sabiendo que se puede disfrutar y hacerlo de una forma más segura. Bien sea como piloto o como empresario siempre he decidido hacer una apuesta clara y decidida en la inversión por la seguridad en las carreteras”.

RICARDO RAMILO, CEO Grupo Rodamoto: “Siempre he sido una persona emprendedora, que piensa constantemente en cómo mejorar. Cuando me plantearon la posibilidad de participar de un proyecto tan bonito y ambicioso como el Aspar Air, ni lo pensé. Trabajo en este sector y me siento muy identificado con los usuarios de moto. Por eso, para mí, este proyecto empresarial es algo muy personal y me hace sentirme orgulloso porque creo que es una gran contribución a la sociedad. El chaleco es un gran avance en la protección de partes del cuerpo desprotegidas hasta hace poco como la espalda o el pecho. Y con Aspar Air pretendemos elevar un poco más los estándares de calidad incluso a nivel de las costuras, los tejidos o la botella de gas. El producto que hoy ve la luz se ha producido con la máxima vigilancia para que sea lo más cómodo y efectivo posible. Y va a sumar aún más a un mercado en constante evolución que hará que la investigación siga su paso y redunde en productos cada vez más perfeccionados y con aplicaciones que se dejen sentir en la sociedad. Pienso, por ejemplo, en las ventajas que podrá acarrear el uso generalizado de estas protecciones para los riders que distribuyen en las ciudades. O incluso en la posible rebaja de los precios de los seguros si se reducen las lesiones por accidentes de moto”.