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Italia 2019: Desde el corazón del paddock, por Samuel Brito

05 de Junio de 2019

Italia 2019: Desde el corazón del paddock, por Samuel Brito

“Ha sido un fin de semana de sensaciones yuxtapuestas. Por un lado el podio de Jaume Masiá y por otro la caída, a cinco vueltas del final, de Andrea Migno. Pero así son las carreras”, anticipaba Samuel Brito desde su espacio en Canariasenmoto, en el que esta semana nos repasa la carrera y el resultado de los pilotos del equipo Bester Capital Dubai de Moto3 en Mugello, el circuito toscano en  el que nunca se duerme.

 

“El viernes, en los primeros entrenamientos nos costaba hacer vueltas rápidas. No teníamos problemas con la moto pero notábamos que nos faltaba algo de motor, lo que nos obligó a sacar a pista mecánicas frescas que rindieran al máximo para un trazado tan rápido y exigente como el de Mugello. Un circuito que no perdona si no tienes todo al cien por cien”, resaltaba el ingeniero de La Palma, responsable de la telemetría de la escuadra italiana, que este pasado fin de semana “jugaba en casa”.

 

El sábado, en los entrenamientos de la mañana, Jaume Masiá conseguía marcar un tiempo que le catapultaba directamente a la Q2. “A Andrea le costó más hacer un vuelta limpia que le diera un tiempo suficiente, lo que le obligó a pasar por el filtro de la Q1”, nos contaba Brito. “Algo que sin embargo no le fue mal ya que llegó más motivado a la Q2, marcando un 4º en la parrilla, para la carrera del domingo. Masiá no pudo hilvanar una vuelta rápida cogiendo rebufos y partiría el domingo desde la 12ª posición, nada mal en una categoría tan igualada como esta”, aclaraba el joven ingeniero palmero.

 

“De cara al domingo teníamos dos estrategias distintas”, confesaba Samuel. “La incógnita a despejar era saber si la carrera sería en grupo, como finalmente fue, o se rompía desde el principio. La idea en el primer caso, era la de quedarse al final del grupo, siempre que fuera compacto y se rodase lo suficientemente rápido para que el grupo perseguidor no les diera alcance”, decía Samuel, guardándose de desvelar la otra estrategia y confirmando que los dos pilotos siguieron las indicaciones al pié de la letra. 

 

“Cuando quedaban unos cinco giros comenzaron los escarceos por los puestos delanteros. Fue en ese momento cuando Migno perdió la referencia de frenada en una curva y se iba al suelo debido a que se le cerraba la dirección”, lamentaba su telemétrico porque “tenía algo guardado de cara al final de carrera”. También tenía algo escondido Masiá que a falta de tres giros fue ganando posiciones hasta ponerse al frente de la carrera: “Lo hizo todo muy bien. Sacó la garra para dar a entender que tenía cierto margen de mejora y con ello meter el susto en el cuerpo a sus rivales. Llegó primero hasta casi el final de carrera, abandonando la cabeza antes de la última curva para pode coger rebufos, pero al final pasó bajo la bandera ajedrezada en una meritoria y peleada tercera posición”, reconocía, contento: “Un tercero después de esta trepidante carrera, es perfecto”.

 

 

“Para nuestro equipo, el Bester Capital Dubai, la de Mugello era la carrera de casa y eso es muy importante. También era el trazado en el que Andrea Migno quería darlo todo ante su afición ya que aquí lograba su primer triunfo en el Mundial de Moto3. Mugello es una pista especial, no sólo para todos los miembros del World Wide Race en el que Samuel desarrolla su trabajo de responsable de la telemetría. “Es la pista soñada. Un trazado que parece haber crecido de forma natural entre estas bellas montañas de la Toscana italiana”.

 

Mugello es el cielo que corona a los campeones y el infierno en el que nadie duerme. Barbacoas permanentes en la faldas de una montaña que parece haber sido creada para el disfrute aficionados que, armados de moto sierras, bocinas e inagotables motores conectados a megáfonos, no paran desde el jueves, jornada en la que comienza ha mostrar su energía, hasta el domingo, con la invasión de pista: “La afición vive las carreras con locura y no pierden ocasión de aclamar a sus pilotos. Salir cada jornada en coche del circuito con su paisano Migno es una proeza. Es una sensación que te deja con el vello a flor de piel durante varias horas…”

 

 

Italia, junto con Gran Bretaña y los Países Bajos, es el único país que ha albergado un Gran Premio cada año desde el inicio del Campeonato del Mundo de motociclismo (1949) hasta hoy. Mugello es el circuito donde una MotoGP registra la velocidad punta más alta. Actualmente el récord lo tiene Andrea Dovizioso (Ducati), que el año pasado llegó a los 356.5 km/h con la Desmosedici GP. Dispone de la segunda recta más larga del calendario (1.141 metros) tras el Circuit Of The Americas de Austin. La pista italiana está entre los circuitos más rápidos del Mundial en cuanto a velocidad media a una vuelta, pero también presenta frenadas muy exigentes. La entrada de la primera curva, en particular, coincide con la frenada más fuerte. En MotoGP, los pilotos pasan de 351 a 91 km/h en 5,6 segundos en una distancia de 300 metros.

 
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