Francia aplazada la obligatoriedad de etilómetros

Desde el 1 de julio del 2012 está en vigor en Francia la obligatoriedad de llevar alcoholímetros en el interior de nuestro vehículo para circular por el país vecino. Si no disponíamos de uno, podíamos arriesgarnos a una multa pues todo conductor debe acatar las normas de circulación del país por el que transita. Es decir, un inglés que venga a España deberá llevar en su vehículo dos triángulos de señalización y un chaleco reflectante, independientemente de si en su país es o no obligatorio.

Pero parece que en Francia están teniendo problemas para poder poner en marcha esta normativa tan peculiar y por ello de momento se ha aplazado hasta marzo del 2013 la introducción de la obligatoriedad. Parece ser que la demanda es muy superior a la oferta y, dicho coloquialmente, demasiado chorizo para tan poco pan.

En Francia no hay suficientes alcoholímetros para todos, borrachos o no
FENADISMER, patronal española de transportistas de mercancías ha dado el aviso ya que del 1 de julio al 1 de noviembre era la moratoria que había dado el Gobierno Francés para adquirir los etilómetros y a partir de entonces, la policía francesa comenzaría a realizar los pertinentes controles y por lo tanto, a multar.

Pero debido a la gran dificultad para suministrar suficiente etilómetros para todos los conductores de camiones, autobuses, turismos y motocicletas de más de 50 centímetros cúbicos, es probable que hasta se estudie la obligatoriedad o no de mantener esta medida. Recuerdo que cuando en España salió la normativa de los chalecos y los triángulos de emergencia, algunos vendedores hicieron su agosto y las estanterías de los centros comerciales, tiendas de recambios y demás aparecían desiertas de existencias. Lo más parecido era hacerte con el chaleco de un cazador.

Pero es que no solo el problema viene porque haya demasiada demanda en Francia sino que los países vecinos como Alemania, España, Italia, Suiza, Andorra o Bélgica también se han visto obligados a hacerse con alguno para poder ir de visita. Y resulta que estos etilómetros portátiles se fabrican únicamente en China y en el Norte de África.

Esperemos que visto que a los franceses no les ha salido demasiado bien, no se apunten más países. Si no, nos acabarán vendiendo una pajita con un orificio en medio y dos globos en los extremos, uno rojo y uno verde