Después de un año, el Ayuntamiento LPGC convocó La Mesa de La Moto

Tras más de un año de ausencia -desde el pasado 23 de mayo de 2017-, la Mesa de La Moto volvía a reunirse esta mañana en las oficinas municipales del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.

La concejalía de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria convocaba una nueva sesión de la Mesa de La Moto que estuvo presidida por José Eduardo Ramírez, titular de la concejalía. A la misma asistieron además de Heriberto Dávila, el Director General de Movilidad, representantes de Emalsa, de Aemoto (Asociación de Empresarios de la moto de la provincia de Las Palmas), de la PMSV, de la Asociación de Autoescuelas y de Moteros de Gran Canaria, además de nuestro medio.

El objetivo de esta “Mesa Sectorial de La Moto” es el de seguir avanzando en el fomento del uso y el fortalecimiento de la cultura de la moto en la ciudad y, siguiendo en la línea mantenida por la actual corporación municipal en relación con el papel de la moto en la movilidad urbana de nuestra ciudad, desde los distintos colectivos se hicieron una serie de propuestas.

Aemoto, dentro de su estrategia de fomento de la formación y la seguridad vial, confirmó que durante la Semana Europea de la Movilidad (del 14 al 22 de septiembre) volverá a repetir la iniciativa de "Mi primera experiencia en moto", ya sea en INFECAR o en otro espacio más abierto al público en general.

Junto al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y a la Asociación de Autoescuelas, Aemoto estudiará la fórmula para asumir la gestión del actual espacio de prácticas de autoescuelas y de exámenes de la DGT, en el barrio de la Feria, para crear un "gran centro de la educación vial", que pueda ser utilizado por empresas, autoescuelas y organismos, tras la preceptiva adecuación de unas instalaciones que actualmente no cuentan con una infraestructura adecuada.

El representante de Emalsa acudió a esta reunión para tratar el crítico asunto de las tapas de registro tantas veces denunciadas y buscar una solución definitiva. "Los registros permanentes cuentan con unas tapas que se adecuan a la normativa vigente y que por lo tanto, no suponen problema alguno", avanzaba Sergio Martínez. "Las que deberían ser circunstanciales pero que por problemas ajenos a Emalsa se han convertido en permanentes, van a ser eliminadas de aquí a final de año", se comprometía, poniendo como ejemplo la de la esquina de las calles Más de Gamíndez con Néstor de La Torre.

El problema, sin embargo, siguen siendo las circunstanciales, que se colocan para pocos días o semanas, planchas metálicas totalmente lisas y sin ninguna señalización: "No encontramos planchas que cumplan el mínimo coeficiente de rozamiento", asumía. "Hemos probado con pinturas, pero no hemos obtenido el resultado esperado. Seguiremos buscando soluciones que permitan hacer nuestro trabajo sin poner en peligro a ningún usuario de la vía", finalizaba.

Varios de los participantes aportaron ideas para que Emalsa obligue a los contratistas a poner planchas antideslizantes, y que además, su instalación cuente con la preceptiva señalización. Otra de las opciones barajadas es cortar el tráfico de la vía hasta que ésta no pueda adecuar a la normativa los elementos instalados en la zona de rodadura para vehículos, entre los que inexorablemente tienen que estar las motos y ciclomotores, sin exclusión posible.

Respecto a la modificación del IVTM (Impuesto de Vehículos de Tración Mecánica), otro de los puntos incluidos por el propio Ayuntamiento en el Orden del Día, y para continuar con la rebaja emprendida en 2014, se están barajando varios estudios que permitan al área de recaudación del consistorio municipal y al interventor municipal, contar con los argumentos necesarios para llevarlo a cabo, "pero eximir de su pago a las motos de 125cc, no es viable", confirmó en Director General de Movilidad, Heriberto Dávila, rebatiéndose asimismo el anuncio hecho en la presentación de la pasada Feria de La Moto LPA Motown.

También se insistió en la necesidad de aumentar el número de plazas de aparcamientos de motos que permitan digerir el constante crecimiento del mercado canario, que se sitúa en una media del 20% anual. Una de las fórmulas planteadas, imitando la propuesta de la Mutua Motera que se está aplicando con enorme éxito en Madrid, es la de marcar como zona de parking de motos la plaza -o plazas, una a cada lado de la calzada, si fuera el caso- más próxima a cada paso de peatones de la ciudad, facilitando de esta manera, la visión que el peatón que pretende cruzar tiene sobre la calzada.