100 kilómetros de diversión y curvas probando las "tres ruedas" de BRP

Sentados tomando el primer café de la mañana, la expectación ya se hacía notar en el estómago. Sabíamos que nos esperaba una jornada sabatina especial, diferente a cualquier otra: íbamos a ponernos a los mandos de varios de los modelos de tres ruedas de Can-Am. Domingo Alonso Powersports, el distribuidor oficial de BRP en Canarias, había organizado una ruta que prometía poner a prueba nuestros sentidos y habilidades.

La ruta no era casual. Conducir estas joyas con bastidor en Y por las carreteras serpenteantes que suben hasta el Pico de Las Nieves, el punto más alto de Gran Canaria a 1.949 metros, era el escenario perfecto. El plan: subir por Cazadores y bajar por San Mateo, todo pensado para sacarle el máximo partido a estos vehículos mientras disfrutábamos de paisajes imponentes y curvas que desafiaban la física.

Cada curva, cada aceleración, nos permitía descubrir nuevas sensaciones, a medio camino entre el mundo de las motos y los coches, pero con ese toque único de Can-Am. Lo mejor de todo, hacerlo en compañía de los responsables de la marca, que con sus consejos lograron que sacáramos lo mejor de cada máquina. Fue una experiencia envolvente y educativa, casi como un curso exprés sobre cómo disfrutar al máximo de estos vehículos recreacionales.

Protagonistas en ruta

Los Can-Am de tres ruedas son mucho más que vehículos recreativos. Ofrecen una estabilidad y seguridad que te sorprende desde el primer momento. El diseño del bastidor en Y se traduce en una conducción cómoda y segura, sin perder esa sensación de adrenalina en cada curva. Aquí te cuento mi experiencia con los tres modelos que probamos.

Can-Am Ryker Rally 900 (82 CV y 280 kg) - 11.361 euros

La puerta de entrada perfecta al universo Can-Am

El Can-Am Ryker Rally 900 fue el primero en ponerse a prueba. ¿Mi impresión? Es como la llave a un mundo nuevo, donde el rendimiento se combina con un diseño aerodinámico que pide ser exprimido. Es ágil, dinámico y, aunque es la opción más accesible de la gama, no se queda corto en emociones.

En los tramos más revirados, el Ryker Rally demostró ser un compañero ágil, ideal para quien quiera lanzarse a la aventura sin complicaciones. Además, su transmisión automática y su ligereza lo hacen increíblemente fácil de manejar. Perfecto para quienes se inician en el mundo de las tres ruedas, pero también para aquellos que buscan algo fresco y divertido. Lo mejor, sin duda, es que te permite centrarte en disfrutar, sin preocuparte por cambiar de marcha. ¡Una fórmula ganadora para quienes buscan acción inmediata!

Can-Am Spyder F3 S (115 CV y 408 kg) - 26.580 euros

El equilibrio perfecto entre diversión y potencia

Pasamos al Can-Am Spyder F3 S, y aquí el cambio fue notable. Este modelo es pura diversión con un extra de potencia que te invita a desafiar la carretera. Su diseño robusto, casi musculoso, te hace sentir que llevas algo especial bajo tus manos. Y con 115 CV, ¡vaya si lo es!

La posición de conducción es cómoda, pero no te deja olvidar que estás al mando de algo serio. La electrónica juega a tu favor con control de tracción, estabilidad, dirección asistida, y hasta un detector de inclinación. En resumen, es un vehículo diseñado para romper barreras, con el equilibrio justo entre comodidad y agresividad. No puedo evitar pensar que es el modelo perfecto para quien quiere algo más que un simple paseo: ¡es la definición de diversión sobre tres ruedas!

Can-Am Spyder RT (115 CV y 464 kg) - 34.320 euros

El rey del lujo y confort

Por último, subimos el listón con el Spyder RT. Aquí ya entramos en otro nivel: es el lujo personificado en tres ruedas. Desde el primer momento que te sientas, sientes que estás en un trono. Es más grande, más robusto, y ofrece un confort inmejorable. Si lo que buscas es devorar kilómetros con estilo y sin renunciar a la comodidad, este es tu modelo.

El Spyder RT no solo es un vehículo, es una experiencia de turismo de lujo. Su espacio de almacenamiento extra lo convierte en el compañero perfecto para viajes largos, y la capacidad de carga lo hace ideal para dos pasajeros que no quieren dejar nada atrás. Además, la versión Sea-To-Sky que probamos añade un toque premium con sus llantas especiales y maletero a juego con la carrocería. ¡Con él, te perderás en la carretera sin arrepentirte!

En resumen, esta experiencia con los Can-Am ha sido como abrir una puerta a nuevas formas de disfrutar la carretera. ¿Lo mejor de todo? Ya estamos pensando en la próxima ruta con Domingo Alonso Powersports. ¿Aún no hay un club Can-Am en las islas? ¡Hora de empezar uno!