09 de Julio de 2010
Si vas con esta moto por algún barrio antiguo de Madrid, verás como los que ya peinan canas se acercan a observarla. Y es que les estás otorgando un gran tema de conversación, hablar de su antigua Derbi, de alguna aventura con la Derbi de un amigo, del deseo de conducir algún modelo en especial que les gustara de joven, evocar los viejos tiempos de alegre juventud.
No es una secuencia lógica este movimiento de Derbi, la Terra Adventure, no corresponde a la política anterior. Sin embargo, es un paso adelante, una zancada más bien, un salto hacia lo posterior, a atravesar la habitación a oscuras y aparecer al otro lado donde quizás encontremos la luz. Pues sí, han dado con el interruptor. Es un paso agigantado. De hecho, la Adventure es la elección más económica a una Trail que necesite carné. Con esta Derbi podrás cumplir tu sueño de conducir la trail que siempre deseaste, pero con el carné de coche. La otra opción es de Honda, con el precio que quizás sea el más caro de todas las 125.
Pero hablemos de esta nueva apuesta de Derbi en su andadura dentro del grupo italiano Piaggio. La moto es realmente grande, dejando sólo entrever que se trata de una 125 y pudiendo pasar totalmente inadvertida a los ojos de cualquiera que no merodee el mundo de las dos ruedas. A pesar de su tamaño, sólo pesa 110 kilos, todo un logro para cualquier moto sea cual sea su cilindrada y más con el tamaño que porta esta Terra.
En el apartado de los detalles, que son los que al fin y al cabo los que hacen el todo, echamos en falta un indicador de cantidad de combustible, hallando un chivato de entrada en reserva. Echamos en falta también un reloj en estos tiempos en los que toda moto posee al menos un indicador parcial digital en el que se nos enseña la hora.
Todos sabemos la utilidad de una 125, la ciudad básicamente, y dentro de esta, el traslado hacia el trabajo o una cita importante. En verano es fácil ver la hora mientras estamos parados a la vera del rojo del semáforo, pero hemos de recordar que en el paralelo 42, 9 meses del año son de frío más o menos intenso donde debemos ir debidamente abrigados, por lo que ver la hora en la muñeca es bastante difícil. Un reloj en el panel para estos menesteres nos viene de lujo.
Sin embargo, la nota final del panel aprueba con un notable. Vamos a circular por el centro de Madrid con esta Derbi Terra Adventure 125 por puro capricho. Nuestro destino es el norte de la capital.Pero encontramos que algo no va bien. Parece ser que de un día para otro, han asfaltado el Paseo de la Castellana: esto así no estaba ayer. Pues si los baches siguen en su sitio, debe ser que es la montura la que nos hace el engaño. La amortiguación de este nuevo proyecto de Derbi es perfecto. La absorción de la irregularidad del asfalto es de sobresaliente, mientras que la extensión y retracción de los vástagos de la horquilla es mínima en las aceleraciones y frenadas.
Respecto a la posición de conducción, debo pecar de intrusismo y aventurarme a dictaminar una conclusión sin haber consultado antes con mi gran amigo Jaime, verdadero experto en estas lides. En mi humilde opinión, creo que no miento al afirmar que la posición encima de esta trail está totalmente conseguida.
Entrando en temas técnicos, el motor consiste en un monocilíndrico con doble árbol de levas que alcanza los 15 caballos declarados a más de 9.000 vueltas y con un pico notable a partir de las 6.500 vueltas. Esto hace de este propulsor un juguete bastante lúdico siempre y cuando le andemos cerca del arco rojo, el cual no corta encendido, pero que le falta vida entre el ralentí y las seis mil vueltas. El semáforo está dentro de este cuadro. Por lo tanto, deberemos subir las vueltas antes de soltar la maneta izquierda para darle vida a la Adventure. A modo informativo, decir que comprime a una relación de 12 a 1, una relación en la que se mueven los motopropulsores de mayor cilindrada pero que provocan el sobrecalentamiento de la cabeza del cilindro y la culata,por lo que una refrigeración líquida como la que porta esta Adventure está más que justificada.
La alimentación está a cargo de un carburador con starter automático y una tobera de 30 milímetros. El arranque matutino se presentará algo evasivo pero en caliente, el carburador es la mejor opción si queremos aprender los sistemas básicos de la mecánica de la moto.
200 kilómetros en un motor de combustión interna no son absolutamente nada. Está como recién salido de fábrica. Y así nos dejaron la moto de prensa, esta Adventure sobre la que os estamos escribiendo estas líneas. Esto viene a tenor de lo que a nuestro juicio adolece la Adventure 125, la caja de cambios. Ruda y tosca, esperando el primer cambio de aceite para suavizar el tacto, lo cual no indica que estemos hablando de una gearbox mala, sino que es tosca, que necesita un extensdo rodaje y que incluso nos puede beneficiar si vamos a darle tralla por su robustez.
Debido a estos motivos, en parado seremos totalmente incapaces de encontrar el punto muerto o incluso de ser engañados por su indicador encendido cuando hay una marcha engranada. Sin embargo en movimiento, es fácil como llevarse la cuchara a la boca. Lo que decimos, le falta rodaje.
En el tema de frenos, desmerece totalmente a la herencia de Derbi porque frena perfectamente, al toque, tanto el trasero como el delantero más y mejor éste último.
Culebreando entre coches, el uso que en más le vamos a dar a esta devoradora todo terreno, nos encontramos en una posición de supremacía por su postura y tamaño a pesar del ancho del manillar. Los espejos en este tema nos ayudan más que perjudican al pasar entre coches, sin vibraciones y reflejando casi todo lo que el conductor necesita observar de su parte posterior.
Esta Derbi hará, como todas sus predecesoras, historia.