MELODÍA DE DIAZEPANES: Un antídoto contra la monotonía (Por Oliver Padrón)

Capítulo 2.- “Repaso a las 5 últimas ediciones del evento Bike Shed London Show”

Siempre hay un cobertizo con criaturas perversas a las que reverenciar, aunque sea en Londres...

A los 15 años decidí que quería una moto. No fue por un impulso hormonal orientado a satisfacer los instintos propios de la edad. Tampoco por un especial interés en la velocidad. Ni por una temprana capacidad para la mecánica. De hecho he sido suficientemente disciplinado con los primeros, temeroso ante las consecuencias de desatar la ira de Hermes, y cuidadoso de no acercarme a la última, puesto que soy consciente de que si intentara cambiar una bujía, acabaría rompiendo el amortiguador trasero… de la moto que estuviera aparcada al lado.

Fue el ansia de aventura y la pasión por la libertad lo que me hizo soñar con tener una moto. Luego vino el interés por su historia. Y finalmente la fascinación por sus posibilidades como expresión artística individual.

Llegado a este punto… ¿por qué no quedarme tan solo en el ámbito de las clásicas o del “custom” tradicional? Pues porque aunque aquello también me gusta y lo disfruto, la escena actual de lo que resumimos como movimiento “Cafe Racer” integra muchos más elementos de la cultura urbana contemporánea que enriquecen su experiencia.

Protagonista BikeShedShow2019: "Un ejemplar súper visto visto en las Redes Sociales. Plan B Motorcycles coge una, para mi desconocida, Benelli 354 Sport y se marca un homenaje a un Ferrari de resistencia. Tremendo ejercicio de imaginación. Más bonita, si cabe, en vivo".

Y toda esa variedad de ámbitos que gravitan a su alrededor (moda, gastronomía, fotografía…etc) dan brillo a mi existencia cual diamante de mil facetas. De forma que, por encima de la clasificación comercial, de los segmentos y los clichés que los acompañan, en mi universo no hay materia o actividad que no pueda ir acompañada de la moto adecuada.

La moto deja de ser un objeto para una actividad específica. La moto se convierte en una manifestación, al mismo tiempo que una extensión, de lo que eres. Pero es que además, esta nueva fascinación que tengo ahora por el mundo de la moto, me ha llevado a acercarme a esa nueva corriente que llaman “restomod”. Si bien es cierto que es algo de lo que se habla sobre todo en el ámbito del automóvil, yo observo que de alguna u otra forma también la estamos viendo en el mundo de la moto.

Protagonista BikeShedShow2018: "El mejor ejemplo de una moto que puedes haber visto en fotos miles de veces que nunca te acabó de gustar. No alcanzarás a valorar en su justa medida hasta que no percibes todos sus volúmenes en vivo. La Yamaha MT09 de AutoFabrica".

Y es que me fascina ver motos de épocas anteriores modificadas con elementos más modernos. O a la inversa, motos actuales sobre las que se adapta la estética de tiempos pasados. Y que quede muy claro que más allá de esto, me importan muy poco los devaneos por etiquetar, mitificar, o denostar tendencias. 

Sueño con ser uno de esos nuevos “Prometeo” que desafían a la tradición con su creatividad, diseñando sus propios Frankenstein. Criaturas perversas para unos, alardes irresponsables de tecnología para otros y, a veces, auténticas novelas góticas de terror para los más osados.

Protagonista BikeShedShow2017: "Un ejercicio de preparación sobre una clásica japonesa que rompe con todo lo que te puedas imaginar. Es decir, como cambiar radicalmente algo que te es tan familiar como una Suzuki Katana".

Es por eso que, en cuanto puedo, viajo para deleitarme con la contemplación en vivo y en directo de esas máquinas. Haciendo millones de fotos que luego me da pereza clasificar y volver a ver.

Ha tenido que ser este encierro forzoso el que me ha llevado finalmente a rescatar el fruto de esa incontinencia, para que haya podido quedar reducida a sólo unos cientos. Y así, esquivando aunque sólo sea una vez, las ataduras que impone la lealtad debida (ganarte la vida con lo que más te gusta también tiene un peaje que pagar), comparto con todos vosotros, sin tapujos, la colección de motos que, por uno u otro motivo, quise conservar como recuerdo durante estos cinco años que he estado acudiendo al Bike Shed London Show.

Protagonista BikeShedShow2016: "Con la base de una Norton actual, que es casi lo mismo que una Norton de otras décadas, tenemos aquí un Frankenstein para muchos puristas. Alicatado hasta las cejas de componentes modernos y con una estética rompedora".

Esta maldita pandemia se ha llevado por delante la edición 2020 del evento estrella organizado por The Bike Shed Motorcycle Club, pero como estoy convencido de que saldremos de esta, me he propuesto inocularte este veneno mío. Para que no desees otra cosa que acompañarme al Tobacco Dock de Londres a disfrutar de la, a buen seguro, siguiente edición del The Bike Shed London Show 2021.

Se que en Canarias somos muchos los que conocemos y disfrutamos de esta afición. Y así nunca me ha faltado con quien compartirla, desde compañeros de trabajo en las diferentes marcas por las que he pasado, clientes-amigos (maravillosa relación bi-direccional en todos los sentidos), la pandilla de Only Locals Garage (con el inconmensurable Diego RedBear al frente de la parte artística) y la complicidad del equipo de Canariasenmoto/ADN Original que siempre da cancha a mis desvaríos.

Protagonista BikeShedShow2015: "La moto de un particular, no la había visto en la vida. El fiel ejemplo de la iniciativa por afición. Algo en lo que destaca este evento, dan mucha importancia a los aficionados particulares. La base en una Triumph de los noventa, pero el resultado es espectacular".

Pero esta vez me gustaría que, dada la situación por la que todos estamos pasando, hicieras un esfuerzo por compartir este pequeño homenaje a la cultura de la moto entre TODOS tus conocidos. 

A lo mejor haces pasar un buen rato (al menos enviarás algo diferente) a un futuro compañero de carreteras… ¡Nunca se sabe!

#NosVemosEnLaCarretera