Leo el titular y los ojos se me ponen como platos. Pero en cuanto continúo con el relato una sombra borra la sonrisa de mi cara. No se trata de retirar los cientos de kilómetros de vallas asesinas de motoristas y ciclistas que, con desfasados y prohibidos postes con perfil en "H", siquen esperando la caida de alguno de los que libremente hemos elegido disfrutar de las carreteras sobre dos ruedas. No. Lo que publica el Boletín Oficial de la Provincia de Santa Cruz de Tenerife es el anuncio de retirada de 76 vallas publicitarias instaladas en los márgenes de las carreteras de interés regional TF-1, TF-5, TF-152, TF-13 y la TF-2... Y aquí viene lo mejor: ¡Por motivos de urgencia!

¿No es mucho más urgente salvar la vida de cualquiera de los que circulamos en moto o en bicicleta por una isla que dice acoger con lo brazos abiertos a los millones de turistas que cada año nos visitan? Muchos utilizan la moto o la bici para descubrir la isla. ¿O es que sólo se acoge de buen grado a quienes utilizan el coche?

La Orden publicada en el BOT exige la retirada íntegra, o sea, bases, estructura y pantalla, así como la reposición de la zona afectada a su estado anterior, en el plazo máximo de quince días hábiles. "Por el riesgo que suponen para la seguridad vial de las personas que transitan por estas vías y porque, además, "atentan" contra el medio ambiente, el paisaje y la imagen turística de la Isla".

¿Cuándo van a pensar en la seguridad vial de los que nos movemos sobre dos ruedas?

Estos dispositivos, guardarrailes o biondas, de demostrada utilidad para evitar salidas de la vía de vehículos de cuatro ruedas, se convierten en trampas mortales para los usuarios que transitan en motocicletas, y en menor medida, para los ciclistas.

Los popularmente conocidos como “quitamiedos”, provocan un elevado número de muertos y de lesionados graves entre los dos colectivos aludidos, por lo que, se solicita de las Administraciones competentes, sustituyan o complementen los guardarraíles instalados por otros dispositivos de similar efectividad para los vehículos de 4 ruedas y que asimismo eviten los desastrosos resultados para ciclistas y motociclistas en caso de accidente y posterior colisión con los mismos.