Pregunta.- Preservar la seguridad de los conductores que transitan a diario por las vías de Gran Canaria es uno de sus propósitos desde que asumió la dirección de la Consejería de Desarrollo Económico, Obras Públicas e Infraestructuras y Transportes, ¿en qué se concreta éste en el caso de los motoristas?
Respuesta.- Los conductores de vehículos de dos ruedas, no sólo motoristas sino también ciclistas, son más vulnerables en caso de accidente de tráfico por razones evidentes. Esta vulnerabilidad se acentúa en algunos puntos de las carreteras de Gran Canaria donde, por las condiciones y características geométricas de las mismas vías hay un riesgo para sus vidas. Asimismo hay que decir que los elementos convencionales de seguridad para este tipo de conductor que sufre un accidente pueden suponer un elemento adicional de riesgo puesto que no evitan que pasen por debajo de la valla, caídas a distinto nivel o la invasión de la calzada contraria. Además muchos motoristas han sufrido amputaciones porque los postes metálicos (IPN) que sostienen las vallas actúan en muchos casos como cuchillas.
P.- ¿La actuación que se ha previsto por parte del Cabildo de Gran Canaria está respaldada por un estudio de la situación de las vías?
R.- Para decidir en qué puntos de la red de carreteras de la isla había que mejorar la seguridad de los motoristas y ciclistas, encargamos un estudio a la empresa GEOCISA. Este estudio atiende a las directrices que establece la Orden Circular 18/2008 sobre el empleo de sistemas para protección de motoristas y que, para ser breves, concreta la colocación de barreras y de señalización vertical en función del radio de las curvas, del tipo de calzada y la conveniencia de colocarlas también en los ramales, en las salidas directas de las autovías y autopistas porque se trata de carriles en los que se producen fuertes desaceleraciones. Además, desde la Consejería de Obras Públicas del Cabildo de Gran Canaria pedimos que se atendiera a otro importante factor y es la identificación de los tramos de concentración de accidentes (TCA), los denominados puntos negros. En base a este documento hemos señalado los puntos en los que es más necesario colocar estas vallas, que suman un total de 18 kilómetros. Una acción que comenzamos el pasado 24 de junio que implica la desaparición de los postes IPN, muy peligrosos para la seguridad de los motoristas, y que se complementa con la colocación de 721 señales verticales de advertencia de peligro por curvas y limitación de velocidad.
P.- ¿Han contado con la participación de los motoristas?
R.- Sí, nos reunimos en varias ocasiones con el presidente estatal de Mutua Motera y con su representante en Canarias, Carlos Molli, porque tenemos muy presente que la aportación de los afectados es muy importante. Además el contacto de estos con los técnicos del servicio de Obras Públicas del Cabildo de Gran Canarias ha sido regular y lo mantenemos, mostrando nuestra disponibilidad para escuchar sus demandas porque somos conscientes de que aún quedan cosas que podemos hacer para mejorar la seguridad vial de motoristas y ciclistas. Éste es un compromiso electoral que Nueva Canarias llevaba en su programa en las pasadas elecciones y que incluimos en el programa del pacto de gobierno en el Cabildo de Gran Canaria. Por lo tanto, estamos dando respuesta a una demanda histórica de estos usuarios de las carreteras y cumpliendo nuestro programa electoral.
P.- ¿A cuánto asciende la inversión del Cabildo de Gran Canaria para esta actuación?
R.- De aquí al final de la legislatura habremos instalado 17.500 metros de vallas de protección para motoristas y 721 señalizaciones, con una inversión total de 2.741.539,93 euros. Tengo que decir que la actuación la hemos estructurado en dos fases. En la primera instalaremos un total de 7 kilómetros en distintos puntos de las siguientes vías: GC-1 entre Las Palmas de Gran Canaria y Mogán, en sus ramales, en el tramo y ramales de la Autovía Marítima. GC-23 entre Plaza de América y Nueva Paterna y en los accesos de esta carretera. GC-2 entre Las Palmas de Gran Canaria y Agaete y en sus ramales. Y en la GC-110 entre Tafira y Las Palmas de Gran Canaria y sus conexiones, en este último punto hemos empezado.
En una segunda fase se actuará en la GC-3, circunvalación de Las Palmas de Gran Canaria a la altura de la potabilizadora; GC-4, circunvalación-Glorieta de Bandama; GC-20, acceso a Arucas por la Granja del Cabildo; GC-31, entre Pico del Viento y la Vega de San José; GC-191, entre Carrizal y el Barranco de Tirajana; GC-100, enlace de la potabilizadora (LPGC) con Arinaga (carretera vieja); GC-500 entre el Cruce de Doctoral y Playa de Mogán; y en el resto de la GC-110. Suponiendo la colocación de 10.500 metros más de barrera.
P.- ¿Qué nivel de seguridad tienen las vallas?
R.- El máximo. Las vallas que está instalando la Consejería de Obras Públicas del Cabildo de Gran Canaria son las de tipo SPM-ES4TUB, se trata de un sistema que ha superado los ensayos de impacto con maniquí a escala real y que en los resultados del HIC (riesgo de lesiones en el cráneo) tiene resultados de 156 para el impacto en postes y de 129 para el impacto en el centro del vano, siendo el valor máximo admisible de 1.000. De esta manera está dentro de los límites correspondientes a la clase mínima de severidad (Nivel I), es decir, que son las que menos daño ocasionan en caso de accidente. Pero también es importante tener en cuenta que además de garantizar la máxima protección a los motoristas, no reducen la eficacia de la barrera metálica ante los vehículos de cuatro o más ruedas.
P.- ¿Y en las nuevas carreteras que el Gobierno de Canarias está llevando a cabo en la isla (autopista Puerto Rico-Mogán, carretera de La Aldea o la autovía del Norte) han previsto la colocación de estas vallas?
R.- De hecho desde la coordinación de la Consejería de Obras Públicas del Cabildo de Gran Canaria hemos realizado ya algunas reuniones técnicas de trabajo para que en la materialización de estas carreteras se incluyan estudios previos para su colocación.
P.- ¿Tienen previstas otras actuaciones nuevas o complementarias?
R.- El mismo día de la colocación de la primera valla el presidente de la asociación de moteros Los Ángeles me hizo llegar una nueva petición por parte de este colectivo y es la utilización de pintura antideslizante en la señalización de las vías. Una propuesta que ya estamos estudiando con la imprescindible ayuda de los técnicos de Obras Públicas del Cabildo de Gran Canaria.
P.- El resto de conductores puede sentirse discriminado ante esta inversión para los motoristas, ¿qué actuaciones tiene previstas su Consejería para el resto de vehículos?
R.- Lo primero que hay que tener en cuenta es que estas vallas también protegen a los demás conductores. En segundo lugar, desde que asumí la responsabilidad del área he recalcado que nuestra acción no se va a concentrar en la creación de nuevas vías sino en la mejora de las ya existentes mediante el ensanche de la plataforma de la calzada, especialmente en curvas, la conservación adecuada de las vías y el correcto drenaje para evitar al máximo el riesgo de accidentes y para hacer más cómoda y transitable la circulación. Para este menester el plan anticrisis que hemos presentado recientemente en el Cabildo de Gran Canaria, ha destinado un importe de 18,5 millones de euros que se destinarán a actuaciones de mejora en la GC-15 entre San Mateo y Tejeda y entre Santa Brígida y San Mateo, y en el kilómetro 15 de esta misma vía corregiremos una curva peligrosa atendiendo a una demanda de ambos ayuntamientos. También están previstas actuaciones en la GC-43 entre Arucas y Teror, en la GC-210 entre Tejeda y Artenara; y en otras numerosas vías.
P.- Algunos hechos evidencia una especial sensibilidad por su parte hacia el mundo del motor, en el Rallye de Canarias de 2007 Nueva Canarias patrocinaba a uno de los coches participantes, acaba de iniciarse la colocación de barreras de protección para motoristas y a principios de la actual legislatura anunció la construcción de una Ciudad del Motor, ¿en qué estado está este proyecto?
R.- La afición de los canarios por el mundo del motor es más que evidente y muy numerosa casi igual a la que puede tener el mundo del fútbol. En este sentido el proyecto de construcción de una Ciudad del Motor en Gran Canaria tiene por objetivo responder a la demanda interna de los aficionados pero también para promover la diversificación económica y la mejora cualitativa de la oferta de ocio de la isla. La ubicación de esta infraestructura será en la zona del barranco de Las Palmas, cerca de Juan Grande, y estamos en contacto con los propietarios del suelo y los posibles inversores para buscar sinergias que afiancen el desarrollo del proyecto.