La DGT busca mejorar la Seguridad Vial en las vías urbanas y por ello, convocaba a los Ayuntamientos con poblaciones superiores a los 100.000 habitantes a una reunión de trabajo con el fin de colaborar y buscar la mejor vía para reducir las cifras de siniestralidad actuales.

Aunque con el paso de los años el número de cifras ha ido disminuyendo, todavía se considera que son demasiado altas. Los accidentes con víctimas en zona urbana siguen representando un importante porcentaje (57%), así como las victimas que ocasionan (el 24% de los muertos, el 42% de los heridos graves y el 55% de los heridos leves), lo que revela una tendencia al alza desde 2011. Además el 24% de los fallecidos en el 2012 se produjeron en vías urbanas de municipios con una población de entre 100.000 y 500.000 habitantes, y el 22% en Madrid y Barcelona. Además, el 62% de las víctimas mortales en vías urbanas fueron peatones.

Los tres factores más importantes que han sido motivo de estudio y preocupación son: la seguridad vial, la congestión generada por el tráfico rodado y la contaminación medioambiental. En este sentido son donde se enfocan la mayoría de los esfuerzos de los Ayuntamientos.

Con está reunión e intercambio de impresiones se buscará encontrar un objetivo común, gracias al flujo de información entre la DGT y los consistorios. Además la Dirección General de Tráfico no quieren que esta colaboración se quede aquí sino que les instan a firmar convenios con ellos para seguir trabajando conjuntamente en la prestación de un mejor y más eficaz servicio a los ciudadanos, en lo que a aspectos administrativos se refiere.

La DGT ha destacado distintas actuaciones que se podrían realizar para mejorar la Seguridad Vial en vías urbanas entre las que se encuentran a mejora en la recogida de información en materia de accidentes, la evaluación de los accidentes en el territorio, la re-ordenación del territorio para minimizar los desplazamientos de la ciudadanía en sus quehaceres diarios, la integración de los diferentes modos de desplazamiento en el núcleo urbano o la posibilidad de intervenir con modificaciones estructurales de bajo coste para segregar y apaciguar los diferentes tipos de tráfico, promoviendo específicamente, por ejemplo, la implantación de los caminos escolares seguros y de los planes de seguridad vial

Así también promueven el el uso de medidas telemáticas de control de tráfico, la adscripción a las campañas de seguridad vial que programa la DGT o la inclusión en las actividades formativas del municipio de aspectos de movilidad segura orientado al público objetivo al que se dirijan.