05 de Julio de 2019
La nueva Diavel 1260 S de Ducati Canarias, la última y espectacular creación de la firma de Borgo Panigale ha pasado recientemente por las manos de nuestro equipo de pruebas, habiendo dejado unas muy buenas sensaciones desde el primer momento.
A modo de introducción diremos que la Ducati Diavel 1260 S es una moto totalmente renovada, con unas líneas muy cuidadas y depuradas que la hacen todavía más espectacular visualmente que el modelo anterior. Su motor, el Testastretta DVT, también ha sido renovado para entregar mayor potencia y ofrecer un par más lineal. Así mismo, el chasis ha sido rediseñado, utilizando el bloque motor como parte estructural. Estos cambios, unidos a la reducción de su distancia entre ejes, la han convertido en una moto mucho más ágil y dinámica, dos aspectos muy positivos para las exigentes carreteras de Canarias.
La segunda generación Diavel 1260 se mantiene fiel al espíritu original de una moto increíblemente especial, dibujando en sus elementos de estilo clave y aplicando en ellos un punto de vista más contemporáneo. Ahora ofrece unas líneas más agresivas y más prestaciones, es más divertida en rutas por carreteras de todo tipo y ofrece un gran confort, tanto para el piloto como para el pasajero.
Estética insuperable
La original y musculosa línea de la parte delantera y la afilada parte trasera con su característico neumático de 240 mm dan a la Diavel 1260 una carácter fuerte e inconfundible. Las amplias tomas de aire y el bastidor multitubular mezclados a la perfección con un nuevo motor Testastretta DVT 1262 de 159 CV que combina una impresionante aceleración con una suave entrega de potencia a bajas revoluciones, haciéndolo ideal para el uso diario o en viajes de largo recorrido.
Las novedades más importantes de esta nueva generación de Muscle Bike de Ducati llegan de su mecánica, con la adopción del propulsor con distribución variable Ducati Testastretta DVT con 1.262 cm3, el mismo que ya equipa la exclusiva XDiavel, aunque revisado. El bicilíndrico de la Diavel 1260 entrega 159 CV (117 kW) a 9.500 rpm y 129 Nm (13,1 kgm) a 7.500 rpm, con una curva de par plana desde regímenes bajos y medios que garantizan una respuesta vigorosa del motor en todo momento. Además, la versión S equipa de serie el sistema Ducati Quick Shift up/down Evo (DQS), permitiendo los cambios de marcha sin tener que accionar el embrague.
Tecnología de última generación
El chasis también se ha modificado, buscando mayor sensibilidad para el conductor en carreteras mixtas mientras que la tecnología y la electrónica punta proporciona un rendimiento de frenado similar al de una moto deportiva (y lo hace con total seguridad, gracias al Cornering ABS de Bosch) junto con un control de las prestaciones del motor más amigable. La excelente posición de conducción y la ergonomía `power cruiser` que contribuyeron al éxito de esta motocicleta, permanecen sin cambios: lo que ha cambiado es la geometría del bastidor.
La parte ciclo de esta Diavel 1260 S es soberbia. Por un lado una horquilla invertida de 48 mm completamente regulable, y por otro, el amortiguador Öhlins, también completamente regulable. En el tren delantero, la frenada de la Diavel 1260 S se obtiene por unos frenos Brembo con pinzas radiales monobloc M50 accionado por una bomba de freno radial PR16/19 con un depósito de aluminio integrado, las pinzas muerden dos discos flotantes de 320 mm. Detrás, en cambio, se detiene un disco de 265 mm por una pinza de doble pistón, de nuevo producido por Brembo.
En el apartado de la electrónica, ahora es a la Inertial Measurement Unit (6D IMU) de Bosch de 6 ejes la responsable de detectar al instante la velocidad de la moto y la aceleración, cruciales en el funcionamiento adecuado de muchos de los dispositivos de control de la Diavel 1260. El paquete electrónico incluye el Cornering ABS Evo de Bosch, Ducati Traction Control Evo (DTC), Ducati Wheelie Control Evo (DWC), Ducati Power Launch Evo (DPL) y Cruise Control.
La nueva Diavel 1260 S es fácilmente reconocible, desde lejos, y para castigo de los fotógrafos, por su caractrístico faro con tecnología Full-LED y DRL. Tampoco hay que usar más llave que la presencial, metida en el bolsillo, ya que la Diavel la detecta en cuanto te acercas. A aproximadamente 1,5 m de distancia, la moto reconoce el código de la llave para permitir su puesta en marcha. El tablero de instrumentos consiste en una pantalla TFT con un módulo de testigos independiente, situados respectivamente por debajo y por encima del manillar.
El tablero cuenta con cuatro modos de visualización diferentes. Novedad en Ducati, el modo Default (predeterminado) muestra sólo la mínima información esencial con un diseño especialmente cuidadoso. En cambio, los otros tres son las clásicas visualizaciones de los modos Track, Full y City asociados con los Riding Modes. La Diavel 1260 tiene unos conmutadores en las piñas exclusivos retroiluminados en rojo.
“Te va a encantar”, me decía Jorge Gómez, jefe de ventas de Ducati Canarias, al entregarme la moto en el concesionario de Las Palmas de Gran Canaria. Lo que no me advirtió, es que “me iba a enamorar”. Desde que te subes en ella, sobre esa musculosa silueta, te sientes poderoso. Su ergonomía es, a pesar de su envergadura, apta para todas las tallas de conductor o conductora. Su asiento está a sólo 780mm del suelo y el manillar queda a una distancia razonable para que cualquier piloto se sienta cómodo.
Las diferencias del asiento son la anchura y el mullido, bastante más cómodo que el anterior. La postura de conducción está muy bien conseguida, un poco más al ataque de lo cabría esperar en una moto cruiser, aunque como veremos más adelante, la dinámica de esta Diavel se parece más a una naked sport que a una cruiser al uso, por lo que la postura se muestra ideal para sacarle todo el jugo a este invento de Ducati que, como ya nos tiene acostumbrados, rompe moldes y dinamita los encasillamientos de ciertos modelos.
La activación del contacto nos regala una panorámica deliciosa, un tablero TFT a todo color y unas piñas retro iluminadas en un sugestivo color rojo. El Testastretta DVT cobra vida con su inconfundible sonido desmo. Una melodía que activa todas las terminales nerviosas de nuestro cuerpo. Empezamos con el modo Urban pero a los pocos kilómetros cambiamos a Touring, para nuestro gusto, el más equilibrado de los modos. En “Urban” disponemos de más suavidad y progresividad de potencia, sin embrago, es en “Touring” en el modo que puedes apreciar mejor las cualidades de este diabólico milagro que encaja con naturalidad una rueda delantera de 120mm de ancho con un tren posterior que le dobla en anchura. Y todo ello con extraordinaria manejabilidad, permitiendo unos ángulos de inclinación sorprendentes y una inesperada y placentera comodidad.
El cambio respecto a la anterior Diavel 1200 es notable. Queda patente que hay algo diferente en una moto que antes ya era una delicia para disfrutar entre curvas. El corazón de la Diavel 1260 es más contundente y enérgico, sin baches en la entrega de potencia. En bajas es más dulce, en medios más contundente y en la zona alta, sobre todo el el modo “Sport” hay que echarle más… bueno, ya me entienden. Los 159 CV de potencia y 129 Nm de par motor, hacen de la Diavel una moto capaz de rodar al ritmo de motos con mayores aspiraciones, con la ventaja de ir más relajado. Las suspensiones suecas aportan ese plus de confort y seguridad para una moto de las cotas de la Diavel.
Puede que la mejor cualidad de la Diavel sea la de engañar, no en vano ese es el trabajo que “quien” le presta su nombre. Y es que parece mentira que una moto de tal envergadura, ancha y sobre todo, larga, se mueva con tanta soltura en los tramos de curvas. El secreto está en el chasis, del que el motor forma parte estructural. A la sección multitubular de acero se ancha la sólida horquilla delantera Óhlins, mientras que sobre el subchasis de fundición de aluminio bascula un monobrazo de aluminio de nuevo cuño al que se ancla un monoamortiguador colocado en posición horizontal-lateral ubicado ahora por encima del basculante y dotado de un nuevo sistema progresivo con bieletas y un recorrido algo mayor.
Estos cambios, junto a unas geometrías modificadas, son los artífices de un comportamiento notablemente distinto sobre el asfalto. Podemos asegurar que la nueva Diavel 1260 ofrece una mayor predicción en la trazada. Pisa de manera más sólida y ofrece en todo momento un comportamiento intachable, incluso tumbados sobre un asfalto no merecedor de ese nombre. Aprovechando las ventajas dinámicas de un cambio quick-shift intachable que permite mantener el ritmo, la estabilidad no se ve comprometida en ningún momento.
De los frenos, con tal equipamiento, no podemos más que alabar sus bondades. Tacto, dosificación y potencia a la carta en todo momento. Habrá que apellidarse Bautista o Dovicioso para llevar al límite tal arsenal tecnológico, eso sí, las estriberas nos ofrecen con su quejido en las curvas una dosis de superación personal.
Poco convencional e inconfundible son sus señas de identidad…
Este diablo de comportamiento angelical y lleno de personalidad justifica los esfuerzos de una marca que se basa en la pasión a la hora de diseñar sus productos. Su original y afilado diseño de la parte delantera contrasta con la musculosa parte trasera, con su característico neumático de 240mm, sin embargo, son esos mismo rasgos los que le confieren ese fuerte e inconfundible carácter tan atractivo.
Es una moto potente, ágil y divertida para cualquier piloto. Tampoco es necesario demostrar una especial habilidad para disfrutarla a buen ritmo gracias a las asistencias electrónicas y a unos excepcionales componentes que lo hacen todo más fácil. La comodidad en marcha es otra de sus virtudes, siempre y cuando no te dediques exclusivamente a ir por autovía, con peligro para tus cervicales.
Una moto, en definitiva, para los verdaderos amantes del motociclismo. Una obra de arte con un rendimiento asombroso para quienes gozan disfrutando de las sensaciones de rodar con aparatos con apariencia de indomables, aunque luego sean corderos con piel de lobo.
Unidad de prueba y equipamiento cedido por Ducati Canarias
Prueba realizada por el equipo de Canariasenmoto