La imagen icónica de las Dunas de Corralejo, sentenciada a muerte

Una de las carreteras más atractivas paisajísticamente del archipiélago canario está sentenciada a muerte. La carretera FV-1 será definitivamente cerrada al tráfico el próximo mes de agosto con el fin de conservar las Dunas de Corralejo, al ser una de las condiciones para que construyera el eje Norte-Sur en Fuerteventura. Se trata del tramo de la FV-1 que discurre entre las llamativas dunas de Corralejo y el océano color turquesa, en el norte de Fuerteventura.

Hasta el mes de octubre, el Gobierno de Canarias evaluará las consecuencias que podría suponer el futuro cierre definitivo de este vial, según la declaración de impacto ambiental del proyecto de la consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias, que contempla que esta vía debería cerrarse cuando entrara en funcionamiento el tramo norte de la autovía en su totalidad.

La Asociación Vecinal Parque Holandés y La Caleta ha iniciado una petición en CHANGE.ORG dirigida a Gobierno de Canarias: "Sería una locura cerrar la antigua FV-1 y dejar a los vecinos aislados. Y ya que decir del impacto que este cierre podría tener en el turismo. ¿Cómo iremos a nuestras playas? ¿Privatizarán algún tipo de transporte alternativo para hacer caja? No olvidemos que el paisaje de esta carretera es único en el mundo. Esperamos que este Gobierno escuche a su pueblo de una vez por todas. PINCHA AQUÍ PARA FIRMAR TU PETICIÓN

Una vez cerrada la carretera actual, todos aquellos ciudadanos que quieran disfrutar de la visión única sobre las Dunas en un entorno único, deberán hacerlo caminando desde sus respectivos hoteles o a través de aalguno de los accesos que se creen en el futuro.

Desde el Cabildo de Fuerteventura proponen la eliminación del tráfico pesado y la reducción de la velocidad por la vía, “pero que no se interrumpa por completo el tráfico”. El actual recorrido entre Puerto del Rosario y Corralejo soporta más de 11.000 vehículos a diario, aumentando los fines de semana.