En los primeros quince días del año han fallecido dos motoristas en accidente de tráfico en Canarias, una cifra intolerable y que debemos de ayudar entre todos a que no se vuelva a repetir... ¿Quieres contribuir a salvar vidas?

No más víctimas en las carreteras como promesa es el título de la campaña. Además, fundamentan su objetivo con la pregunta: ¿Quieres contribuir a salvar 30000 vidas? La Carta Europea de Seguridad Vial ha contribuido a salvar más de 40 000 vidas al reunir a 2.300 entidades que se han comprometido a concretas actividades relacionadas con la seguridad vial.

Con la publicidad de su vídeo, les ayudará a seguir convenciendo a más entidades para actuar y contribuir a salvar vidas. Hay gente dispuesta a ello y por eso, hace su promesa para unirse al compromiso.

El compromiso es reducir el número de víctimas mortales en siniestros de tráfico. Además, se propone como objetivos bajar a cero el número de niños fallecidos sin sistema de retención infantil, reducir los fallecidos por atropello, por salida de la vía en carretera convencional, así como los accidentes “in itinere”: de casa al trabajo y del trabajo a casa.

Según, La Estrategia de Seguridad Vial 2011-2020, se propone como objetivo disminuir en un 25% los conductores de 18 a 24 años fallecidos y heridos graves en fin de semana, en un 20% los fallecidos y heridos graves usuarios de motocicletas y en un 10% los fallecidos mayores de 64 años, bajar del 1% los positivos de alcoholemia en los controles preventivos aleatorios, reducir un 50% el porcentaje de vehículos ligeros que superan el límite de velocidad en más de 20 km/h y lograr un millón de ciclistas más en desplazamientos habituales sin que se incremente su tasa de mortalidad.

La cultura vial es necesaria en los colegios

La seguridad vial es un problema de salud social. En 2011, más de 30.000 personas murieron en las carreteras de la Unión Europea. Este es el equivalente de 205 Boeing 737 estrellándose y matando a todos a bordo.

Los jóvenes están especialmente en riesgo. La principal causa de muerte entre los adolescentes son los accidentes de tráfico.

Por cada muerte en las carreteras europeas hay un número estimado de 4 lesiones por incapacidad permanentemente como daño cerebral o daño de la médula espinal, 8 heridos graves y 50 heridos leves.

¿Cómo podemos contribuir a esta causa? Pues, mejorando la educación y la formación de los conductores, promoviendo el uso del limitador de velocidad en el coche, la elaboración de una instrucción sobre la señalización horizontal de la distancia de seguridad, la reforma del Reglamento General de Circulación para ordenar los desplazamientos en bicicleta en la ciudad, y la incorporación de prevención de los accidentes de tráfico en los programas de formación sobre prevención de riesgos laborales para trabajadores y empresarios.

Por otra parte, la DGT mejorará la atención a las víctimas de los accidentes de tráfico, para lo cual estudiará un nuevo baremo de indemnizaciones para las víctimas de los accidentes de tráfico y favorecerá el intercambio de las mejores prácticas en la Atención Sanitaria en los Accidentes de Tráfico. Además, para mejorar la conducción de nuestros más jóvenes se está estudiando la regulación de la conducción de menores de 18 años acompañados de un adulto con carné como forma alternativa de realizar las prácticas necesarias para acceder al examen práctico para la obtención del permiso de conducir.

El ofrecimiento de acciones a las víctimas y perjudicados

Llegados a este punto, significa que estamos en el trance de padecer un siniestro con ocasión del tráfico y el problema ha ido más lejos que unos simples daños materiales en nuestro vehículo. Para ello, debemos saber que los agentes de tráfico además de realizar las labores para esclarecer lo sucedido, darán a conocer, en un principio, a todos los implicados el ofrecimiento de acciones, es decir, la información de los derechos que se tiene como víctima o perjudicado por el delito o falta.

La llamada al proceso que se le hace al perjudicado, no solo hay que llamar al proceso a la víctima sino a los que se les haya perjudicado, por ejemplo en un homicidio, la victima es el fallecido y los perjudicados son la familia. Una vez avanzado el caso, con la instrucción del correspondiente atestado, el Juez de Instrucción tiene que tener claro quienes son los presuntos autores y los perjudicados por el hecho. Esta llamada se puede llevar a cabo en distintos momentos:

• En la primera declaración policial: art. 789.4 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim.)
• En la primera declaración judicial: el Juez de Instrucción debe verificar el ofrecimiento de acciones, art. 109 LECrim.

Al mismo tiempo, el perjudicado puede:

• Renunciar a las acciones: el Ministerio Fiscal no va ejercer la acción civil si el perjudicado no quiere reparación.
• Mostrarse parte: anuncia su personación en el proceso para ejercer la prestación penal.
• Esperemos no necesitar ese ofrecimiento de acciones durante nuestra etapa como conductores. La responsabilidad al volante empieza por saber las normas y después, cumplirlas. Únete a esta campaña.